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.2012 - Volumen 5, Número 1 (e)
 
     
La Evaluación de la Docencia en Iberoamérica
 

José González Such

 

La evaluación de la docencia se ha convertido durante estos años en un referente inexcusable para la consecución de la calidad en la enseñanza. Durante los últimos años ha ido cambiando, desde una situación en la que no había ningún referente de este tipo de evaluación hasta la actualidad, en la que prácticamente todos los países iberoamericanos poseen centros o servicios relacionados con los ministerios de educación centrados en la evaluación de la calidad de la educación de sus sistemas, lo que está generando mucha información, que como señalan Murillo y Román (2010:98) …”si antes afirmábamos que no hay mejora sin evaluación, ahora estamos convencidos de que la evaluación puede ser el mayor obstáculo para el avance.” El logro cognitivo continúa siendo lo prioritario e importante a medir en el campo educativo formal y estas evaluaciones se caracterizan por una gran  fragmentación  (Murillo y Román, 2010).

Es indudable que la evaluación de cualquier sistema educativo ha de ser global, no fragmentada, teniendo en cuenta de forma holística los elementos que componen la realidad educativa: no podemos evaluar únicamente un sistema por los aspectos cognitivos, ni por otro aspecto considerado de manera aislada. La Educación es el resultado de la conjunción de múltiples y diversos aspectos, en el que incluyen los aspectos contextuales, el profesor, el alumno, sus relaciones, etc. En este sentido coincidimos por Murillo y Román (2010) en cuanto que propugnan esta evaluación de la escuela en su conjunto y en la que debe incluirse la evaluación de la gestión de las administraciones educativas y fomentar el compromiso de la sociedad en la que se insertan. La educación debe ser un instrumento para la participación social, no un elemento aislado de la sociedad que la genera y la sustenta.

Dentro de la Evaluación de la docencia encontramos muchos y variados aspectos relacionados. La Evaluación de la Docencia en Iberoamérica debe partir de una situación multivariada, en la que se sitúan no solo los aspectos relacionados con la evaluación de la docencia sino también con los aspectos demográficos, etc. de cada uno de los países en que se va a analizar. Diversos estudios nos dan cuenta de la situación y desarrollo en distintos países (Morles, Medina y Álvarez, 2003; Salazar, 2008; Rodríguez, 2008; Parra y Trujillo, 2008; Claverie, González  y Pérez, 2008; Jornet, 2009; González Such, 2009).

La búsqueda de la calidad es una constante en cualquier sistema educativo. Para lograrla, es necesario establecer una serie de requisitos y procesos que la garanticen. El eje vertebrador de cualquier sistema educativo es el binomio profesor-estudiante. Resulta evidente la necesidad de esta evaluación. Inicialmente en la mayoría de países se ha establecido el sistema de evaluación de la docencia en niveles universitarios. No obstante, en los niveles no universitarios esta evaluación no pasa de ser anecdótica y de carácter voluntario.

La internacionalización es uno de los conceptos que actualmente está tomando mayor auge. Esta internacionalización implica una serie de lineamientos sobre la base de la diversidad evidente de los sistemas que pretendemos homogeneizar. Esta dicotomía se ha revelado especialmente compleja en el EEES, en la que esta homogeneidad aún no se ha conseguido totalmente, a pesar de los diversos intentos por parte de los gobiernos.

Resulta evidente la multiplicidad de variables que influyen en la Evaluación de la Docencia. Además, se debe tener en cuenta el ámbito político, social, educativo, etc. que confluye en cada país. Como ejemplo, se describen en las tablas XXX y XXXX la situación actual en la que se encuentra cada uno de los países, y que abarcan múltiples aspectos diferenciadores, desde número de habitantes hasta PIB de cada uno de los países. No obstante, creemos que se puede llegar a un modelo común que intente asumir una concepción globalizadora de la Evaluación de la Docencia como forma de poder contrastar los distintos sistemas y llegar a una mejora real de la docencia como eje fundamental de la educación.

Aun considerando la complejidad aludida de la función docente, numerosos autores han intentado definir cuáles son sus características fundamentales y las implicaciones que ello tiene para la evaluación (González Such, 1998). Hernández y Sarramona (2002: 559) indican que parece existir un acuerdo en considerar que es “una ocupación polivalente, que incluye valores, principios morales, además de habilidades didácticas y conceptuales”. Tejedor (2003:176) señala que la “evaluación del profesorado es un proceso que debe orientarse fundamentalmente a la estimación del nivel de calidad de la enseñanza a fin de contribuir progresivamente a su mejora. (...) El proceso de evaluación debe concebirse igualmente como estrategia adecuada para fundamentar la investigación sobre el proceso de enseñanza-aprendizaje en el ámbito universitario, en cuyos resultados deberían basarse las pautas sugeridas para la necesaria innovación metodológica.”

Tejedor (2003:164) señala dos consecuencias cuando aceptamos que el propósito de la evaluación es avanzar en la mejora (innovación):

  • “la evaluación ha de ser parte integral del planteamiento innovador (no un dispositivo subordinado), lo que exige la participación de las partes implicadas en todas las fases del proceso
  • debe desligarse de cualquier intento de fiscalización y penalización, intentando valorar los diversos elementos del proceso educativo con el principal objetivo de informar al propio proceso de las condiciones para su transformación y mejora.”

La evaluación de la docencia puede ser estudiada desde distintos puntos de vista: desde inserta en un sistema de evaluación institucional hasta la evaluación de la docencia que realiza el profesor en un aula concreta. Esto hace que las dimensiones a considerar varíen en función de distintos aspectos. Incluso dentro de un mismo país las dimensiones que se consideran importantes para definir un profesor de calidad varían en función de los niveles considerados e incluso entre instituciones del mismo nivel (Universidades, etc.).

Tabla 1. Organismos de acreditacion por año de creacion

1990 – CSE Chile
1992 – CNA  Colombia
1995 – CONEAU Argentina
1995 – MEC Uruguay
1999 – CNAP Chile
1999 – SINAES Costa Rica
2000 – COPAES México
2000 – CNEA  Ecuador
2001 – ANECA  España

Fuente: Revelo, 2002: 5

Los sistemas de acreditación y evaluación se pusieron en marcha en la década de los 90; otros se han ido creando posteriormente. Se han realizado algunos estudios sobre los sistemas de evaluación y acreditación en el ámbito iberoamericano (Revelo, 2002).  En este estudio, Revelo realiza un análisis de 10 países.  Como señala, “En conjunto se aprecia heterogeneidad, por su origen, objeto, naturaleza y formas de organización.” (Revelo, 2002:2). Estos sistemas se han creado en algunas ocasiones desde el gobierno: Argentina, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, España o Uruguay, mientras que en otros casos han sido las instituciones implicadas, agrupándose en asociaciones, las que crearon estos sistemas, como en el caso de México y Venezuela, o en el caso de Costa Rica en el que varias universidades se unieron.

Ahora bien, ¿Qué indicadores podemos utilizar para evaluar la docencia y al profesorado?. Ha habido múltiples acercamientos, con distintos indicadores que señalan de nuevo que no existe un único modelo que pueda cubrir las necesidades de las instituciones o de los estados para evaluar al profesorado. Como ejemplo, incluimos las dimensiones e indicadores que Fernández Lamarra y Cópola (2008) extraen como fundamentales para evaluar la función docente a partir de otros informes en los que se comparan las seis primeras evaluaciones externas realizadas por la CONEAU. En este sentido, Tejedor (2009) realiza un metaanálisis referencial de conductas del profesor que se asocian con el buen rendimiento académico de los estudiantes universitarios y con una mayor eficacia docente.

Tabla 2. Dimensiones e indicadores para evaluar la función docente

Dimensión

Indicadores

La remuneración de los docentes y la distribución del tipo de dedicación

Proporción de docentes por alumno. Cantidad de docentes con dedicación simple, semiexclusiva y exclusiva

El estudio del sistema de incentivos

Relación de docentes-investigadores en el programa de incentivos sobre total docentes.

El análisis de la propuesta curricular
El examen de la articulación teoría práctica de distintas ofertas académicas en particular las careras profesionalizantes

Porcentaje de retención. Tasa de graduación. Rendimiento de los alumnos
Análisis de la oferta educativa de grado y posgrado.

Estrategias de promoción y formación del personal docente

Porcentaje de docentes concursados. Porcentaje de docentes con formación de posgrado.

Estudio de la relación entre investigación /profesionalización

Participación de los docentes en investigaciones. Dedicaciones a la docencia, a la investigación. Políticas de promoción científica

Costos

Cantidad de alumnos por docente
Gasto por alumno. Gasto por egresado

Fuente: Fernández Lamarra y Cópola, 2008.

2. Desarrollo: Fuentes e instrumentos para la evaluación de la docencia

Son muchas las fuentes de información que se han propuesto para recoger información sobre el profesorado, las principales son:

  • Rendimiento de los estudiantes
  • Evaluación por iguales
  • Alumnos
  • Autoevaluación
  • Evaluación por expertos
  • Evaluación por administradores o superiores (administradores, decanos, etc.)
  • Exalumnos
  • El clima de clase
  • Materiales
  • Productividad investigadora
  • Informes: notas, matriculados, etc.
  • El portafolio

Cabe utilizar varias fuentes de información para evaluar la docencia para favorecer la calidad de la información. Elizalde y Reyes (2008) señalan diversos modelos: el modelo basado en la opinión de alumnos, el modelo de evaluación a través de pares, el modelo de autoevaluación y el modelo de evaluación a través del portafolio.  Los distintos usos de estas fuentes de información han sido objeto de análisis desde la RIIED (Litwin, 2010; Arbesú y Argumedo, 2010, Páez, 2010).

Tejedor y Jornet (2008) indican que el modelo global de evaluación del subsistema profesorado deber tener en cuenta las siguientes aspectos y fuentes de información:

  • “Evaluación de la actividad instructiva (aula y tutorías). Autoinforme del profesor, opinión de las autoridades académicas del centro y opinión de los alumnos.
  • Evaluación de la actividad investigadora, a partir de indicadores relacionados con la calidad, la cantidad y la utilidad social y académica (incorporación de los resultados de investigación y de las aportaciones metodológicas a la actividad instructiva).
  • Evaluación de la actividad departamental.
  • Evaluación, con carácter complementario, de la actividad relacionada con la prestación de servicios a la comunidad (universitaria, profesional y social).
  • Evaluación de las condiciones de trabajo del profesor. Para obtener una valoración realista, sin sesgo, deberán considerarse las condiciones académicas, personales e institucionales en las que se desarrolla el trabajo del profesor evaluado. Esto incluye su status profesional, organización académica, disponibilidad de recursos para docencia e investigación, programas de formación docente de la institución y características de los alumnos, con el fin de contextualizar ampliamente el proceso de evaluación del profesorado en sentido amplio.”

De cada una de estas fuentes podremos obtener información mediante distintos instrumentos, entre los que se encuentran los cuestionarios, la observación, los registros académicos, las pruebas de rendimiento, pruebas estandarizadas o no estandarizadas, los comentarios escritos, los grupos de discusión, los materiales utilizados por el profesor, etc. Un aspecto fundamental en la recogida de información de estos instrumentos es que estén técnicamente bien construidos.

Aunque no se encuentra un acuerdo respecto a lo que se considera un buen profesor, Tejedor (2003:165) señala algunos aspectos que se tienen claros respecto la evaluación:

  1. “Se trata de un proceso que debe orientarse a la estimación del nivel de calidad de la enseñanza
  2. Se trata de conseguir una utilidad efectiva del conjunto del proceso como recurso de perfeccionamiento docente
  3. Se pretende informar al profesor para ayudarle a cambiar
  4. La evaluación permite investigar sobre el proceso de enseñanza-aprendizaje
  5. 5) Aunque no hay recetas universales, se sabe que hay comportamientos docentes que ayudan mejor que otros a conseguir los objetivos propuestos”

El estudio de la evaluación de la docencia exige tener en cuenta diversos aspectos:

  • País y contexto socioeducativo
  • Nivel del que se trate: Primaria, Secundaria o Superior
  • Usos de la evaluación: Formativo o Sumativo

Los aspectos que debemos considerar son:

  • Qué se evalúa
    • Dimensiones docentes. Profesor efectivo
  • Cómo se evalúa
    • Metodología de la Evaluación
    • Instrumentos
  • Para qué se evalúa: Usos de la evaluación
    • Formativo
    • Sumativo
  • Quién evalúa
    • Pares, compañeros
      • Del mismo departamento
      • De otros departamentos
    • Autoridades académicas: Director, Decano…
    • Estudiantes
    • Evaluadores externos
    • Autoevaluación
  • Aspectos éticos

Así, si consideramos un modelo global que asuma distintos aspectos del profesor para su evaluación, se pueden señalar los aspectos y fuentes de recogida de información que señala Tejedor (2003:165):

“a) Evaluación de la actividad instructiva (aula y tutorías):
— opinión de los alumnos
— opinión de las autoridades del centro
— autoinforme del profesor
b) Evaluación de la actividad investigadora, a partir de indicadores relacionados con la calidad, la cantidad y la utilidad social y académica (incorporación de los resultados de investigación y de las aportaciones metodológicas a la actividad instructiva)
c) Evaluación de la actividad departamental
d) Evaluación, con carácter complementario, de la actividad relacionada con la prestación de servicios a la comunidad (universitaria, profesional, social,...).
e) Evaluación de las condiciones de trabajo del profesor. Es importante este último punto ya que si queremos obtener una valoración realista, insesgada, habrán de tenerse en cuenta las condiciones académicas, personales e institucionales en las que se desarrolla el trabajo del profesor evaluado: status profesional, organización académica, disponibilidad de recursos, programas de formación docente de la institución, características de los alumnos,...”

Resulta evidente la multiplicidad de variables que influyen en la Evaluación de la Docencia. Además, se debe tener en cuenta el ámbito político, social, educativo, etc. que confluye en cada país. La situación actual en la que se encuentra cada uno de los países es muy diversa y abarca múltiples aspectos diferenciadores, desde número de habitantes hasta PIB de cada uno de los países, así como la forma de evaluar la docencia. No obstante, desde la RIIED, y a partir de las distintas reuniones que se han realizado, se han concretado las siguientes Dimensiones a tener en cuenta (RIEED, 2008; Rueda, 2008):

  1. Dimensión política de la evaluación.
  2. Dimensión teórica.
  3. Dimensión Metodológica-procedimental.
  4. Dimensión de uso.
  5. Dimensión de evaluación de la evaluación.
  6. Dimensión ética (disgregada en el Coloquio de Buenos Aires).

Las líneas de investigación que se deben tener en cuenta a la hora de abordar la ED las indica Rueda en 2008:

  • Uso de resultados de la evaluación de la docencia
  • Impacto de la evaluación de la docencia
  • Investigaciones comparadas entre países iberoamericanos
  • Metodologías de investigación de la evaluación de la docencia
  • Estructuras de formación docente en diversos países y su vinculación con la evaluación docente.
  • Evaluación de la docencia con propósito de acreditación/certificación
  • La evaluación de competencias como alternativa de mejoramiento
  • Evaluación formativa y su legitimación

Durante el último coloquio de la RIIED se realizaron distintos acercamientos para analizar la situación actual de la Evaluación de la Docencia en algunos países: Rueda et al, 2010; Lora, Torquemada y Olvera, 2010; Contreras, 2010; Cordero y Luna, 2010), o desde la perspectiva de la evaluación de competencias docentes (Cisneros-Cohernour y Stake, 2010; Leyva, 2010; García y Loredo, 2010, entre otros trabajos.

Como vemos, la RIIED está centrando su trabajo en muchos ámbitos de la Evaluación de la Docencia para dar respuesta a una realidad: la mejora de la docencia en los distintos niveles educativos como pilar fundamental para mejorar la calidad de la enseñanza, en un ámbito en el que la característica fundamental es la heterogeneidad, tanto a nivel de estados (extensión, número de habitantes, etc.) como en los sistemas educativos y, por supuesto, en la evaluación de la docencia que es el ámbito que nos ocupa. La pregunta es si llegaremos algún día a consensuar un modelo de evaluación que tenga unas características comunes.

Como podemos comprobar, la Evaluación de la Docencia es un tema de especial relevancia  en el que debemos tener en cuenta múltiples factores. Una evaluación bien realizada repercutirá sin duda en la mejora de la enseñanza en cualquiera de los niveles considerados.

 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Cisneros-Cohernour, E. y Stake, R. (2010). La Evaluación de la Docencia en Educación Superior: de Evaluaciones Basadas en Opiniones de Estudiantes a Modelos por Competencias. Reflexiones sobre el Caso Mexicano. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, 3 (1e), pp. 218-231. http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art17.pdf.

Claverie, J., González, G., y Pérez, L. (2008). El Sistema de Evaluación de la Calidad de la Educación Superior en la Argentina: El modelo de la CONEAU. Alcances y Límites para Pensar la Mejora. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, 1(2), pp. 148-164.
http://www.rinace.net/riee/numeros/vol1-num2/art10.pdf.

Contreras, G. (2010). Diseño y Operación de un Sistema de Evaluación del Desempeño Docente con Fines Formativos: la Experiencia de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, Chile. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, 3 (1e), pp. 179-191. http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art14.pdf

Cordero, G. y Luna, E. (2010). Retos de la Evaluación de los Programas de Formación de Profesores: el Caso de un Programa en Métodos de Aprendizaje Cooperativo. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, 3 (1e), pp. 192-201.

Dirección Nacional de Información y Evaluación de la Calidad Educativa (2007): Anuario Estadístico Educativo 2006. Disponible en: http://www.oei.es/pdfs/anuario_estadistico2007.pdf

Elizalde, L. y Reyes, R. (2008). Elementos clave para la evaluación del desempeño de los docentes. Revista Electrónica de Investigación Educativa, Especial. Disponible en: http://redie.uabc.mx/NumEsp1/contenido-elizaldereyes.html

Fernández Lamarra, N.; Coppola, N. (2008).La Evaluación de la Docencia Universitaria en Argentina. Situación, Problemas y Perspectivas. EnMemorias del IV Coloquio Iberoamericano sobre la Evaluación de la Docencia. México, DF. 29, 30 y 31 de octubre de 2008 p. 96-123. Disponible online en: http://rinace.net/riee/numeros/vol1-num3_e/art7.pdf

García, B. y Loredo, J. (2010). Validación de un Modelo de Competencias Docentes en una Universidad Pública y otra Privada en México. Reflexiones sobre el Caso Mexicano. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, 3 (1e), pp. 246-263. http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art19.pdf.

González Such, J. (1998): Evaluación de la Docencia Universitaria. Valencia: CSV.

González Such, J. (2009): La evaluación del profesorado Universitario. En J.M. Jornet (Ed.): La letra sin sangre entra. Testimonios sobre la educación en la España democrática (1978-2008). Valencia: PUV.

Hernández, M. y Sarramona, J.: La autoevaluación docente. Una propuesta para la formación profesional. Bordón 2002, 54, 4, 559-575. http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art15.pdf.

Jornet, J. M. (2009): La evaluación del sistema educativo en la España democrática. En J.M. Jornet (Ed.): La letra sin sangre entra. Testimonios sobre la educación en la España democrática (1978-2008). Valencia: PUV.

Leyva, Y.E. (2010). La Evaluación como Recurso Estratégico para la Mejora de la Práctica Docente ante los Retos de una Educación Basada en Competencias. Reflexiones sobre el Caso Mexicano. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, 3 (1e), pp. 232-245. http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art18.pdf

Leyva, Y.E. (2010). La Evaluación como Recurso Estratégico para la Mejora de la Práctica Docente ante los Retos de una Educación Basada en Competencias. Reflexiones sobre el Caso Mexicano. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, 3 (1e), pp. 232-245.  http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art18.pdf.

Litwin, E. (2010): La Evaluación de la docencia: plataformas, nuevas agendas y caminos alternativos. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, v3, n1e, Disponible online en: http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art4.html

Lora, L.E; Torquemada, A.D. y Olvera, B.I. (2010): Usos e impacto de la docencia en la Universidad Autónoma del estado de Hidalgo: resultados de la meta-evaluación. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, v3, n1e, Disponible online en: http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art7.html

Morles, V.; Medina, E. y Alvarez, N. (2003): La educación Superior en Venezuela. Informe 2002 a IESALC_UNESCO.

Murillo, F.J. y Román, M. (2010): Retos en la evaluación de la calidad de la educación en América Latina. Revista Iberoamericana de Educación, n 53n, 97-120.

Páez, R.O. (2010). Evaluación de las funciones docentes en Entornos Instructivos Virtuales (EIV). Certezas, cuestionamientos y sinceramiento. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, 3 (1e), pp. 147-158.  http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art11.pdf.

Parra Sandoval, M.C. Trujillo, M.  (2008). La Evaluación de la Docencia Universitaria en Venezuela: una Tarea Inconclusa. EnMemorias del IV Coloquio Iberoamericano sobre la Evaluación de la Docencia. México, DF. 29, 30 y 31 de octubre de 2008 p. 85-95. Disponible online en: http://rinace.net/riee/numeros/vol1-num3_e/art6.pdf

Revelo, J. (2002): Sistemas y organismos de evaluación y acreditación de la educación superior en Iberoamérica. Reto de garantía y de fomento de la calidad. Primer Seminario Internacional: Educación Superior, Calidad y Acreditación.  Cartagena, 10 al 12 de julio.

RIIED (2008). “Reflexiones sobre el diseño y puesta en marcha de programas de evaluación docente”. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, volumen 1, número 3 (e). Disponible en: http://www.rinace.net/riee/numeros/vol1-num3_e/reflexiones.pdf

Rodríguez, J. G. Evaluación del Profesorado en Universidades Públicas. Una Aproximación a la Situación en Colombia.EnMemorias del IV Coloquio Iberoamericano sobre la Evaluación de la Docencia. México, DF. 29, 30 y 31 de octubre de 2008 p. 46-66. Disponible online en: http://rinace.net/riee/numeros/vol1-num3_e/art4.pdf

Rueda Beltrán, M. (2008).La Evaluación del Desempeño Docente en las Universidades Públicas en México. InMemorias del IV Coloquio Iberoamericano sobre la Evaluación de la Docencia. México, DF. 29, 30 y 31 de octubre de 2008 p. 8-17. Disponible online en: http://rinace.net/riee/numeros/vol1-num3_e/art1.pdf

Rueda, M.; Luna, E.; García, B. y Loredo, J. (2010): la evaluación de la docencia en las universidades públicas mexicanas: Un diagnóstico para su comprensión y mejora. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, v3, n1e, Disponible online en: http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art6.html

Salazar Ascencio, J. (2008). Diagnóstico Preliminar sobre Evaluación de la Docencia Universitaria. Una Aproximación a la Realidad en las Universidades Públicas y/o Estatales de Chile. InMemorias del IV Coloquio Iberoamericano sobre la Evaluación de la Docencia. México, DF. 29, 30 y 31 de octubre de 2008 p. 67-84. Disponible online en: http://rinace.net/riee/numeros/vol1-num3_e/art5.pdf

Secretaría de Políticas Universitarias (SPU)(2006): Anuario 2006 de Estadísticas Universitarias de la República de Argentina.

Tejedor, F. J. y Jornet, J. M. (2008). La evaluación del profesorado universitario en España. Revista Electrónica de Investigación Educativa, Especial. Disponible en: http://redie.uabc.mx/NumEsp1/contenidotejedorjornet.html

Tejedor, F.J. (2003): Un modelo de evaluación del profesorado universitario. Revista de Investigación Educativa, 21 (1), 153-182.

Tejedor, F.J. (2009): Evaluación del profesorado universitario: enfoque metodológico y algunas aportaciones de la investigación. Estudios sobre Educación, 16, 79-102.

Anexo 1. Fuentes de información en la evaluación de la docencia en distintos
países iberomericanos

País

125px-Flag_of_Mexico.svg.png
México

125px-Flag_of_Argentina.svg (1).png
Argentina

125px-Flag_of_Venezuela.svg.png
Venezuela

125px-Flag_of_Chile.svg.png
Chile

125px-Flag_of_Spain.svg.png
España

125px-Flag_of_Colombia.svg.png
Colombia

Instituciones Ed. Superior IES/Universidades

2.107/126

106/86

180/23

60

/77

279

 

Pub

Priv

Pub

Priv

Pub

Priv

Pub

Priv

Pub

Priv

Pub

Priv

Porcentaje

47

53

46

54

42

58

68

32

50.53

49.46

% Estudiantes

67

33

83.50

16.50

65

35

57

43

89

11

31.40

68.40

Estudiantes

2.446.726

1.304.003 (2006)

687.694 (2001)

250.000 Pub.

1.504.276

1.300.000 (2006)

Ley reguladora

Ley para la Coordinación de la Educación Superior
Ley General de Educación

Ley de Educación 2006
Ley 24.521 de Educación Superior 1995

Ley Orgánica de Educación
Ley de Universidades 1972

Ley No.18.692 Orgánica Constitucional de Enseñanza (LOCE) 1990

Ley Orgánica de Universidades (LOU) 2001
Ley Orgánica de Educación 2006
RD 1393/2007

Ley 30 1992

Organismo

Asociación Nacional de Instituciones de Educación Superior ANUIES
Consejo para la Acreditación de la Educación Superior, A.C. COPAES
2000

Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria CONEAU

Consejo Nacional de Universidades CNU
Sistema de Evaluación y acreditación de las Universidades SEA (en creación)

Consejo de Rectores de las Universidades Chilenas
CHURCH
Comisión Nacional de Acreditación de Programas CNAP
Consejo Superior de Educación CSE

Conferencia de Rectores
CRUE
Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación
ANECA

Sistema de Universidades del Estado SUE
Sistema Nacional de Acreditación SNA
Consejo Nacional de Acreditación CNA

Nº universidades en el organismo

126

25

74

32

Observaciones

Desigualdades en la cobertura. Dificultad de coordinación. Poca investigación

Acreditación voluntaria y temporal Heterogeneidad interinstitucional
Aumento matrícula

Acreditación valuntaria de postgrados. Aumento instituciones privadas

Extensión a programas de pregrado Comisión Nacional de Acreditación de Pregrado (CNAP) 1999. Carácter voluntario

Acreditación Obligatoria y referida a estándares de calidad

Reducción financiación de la universidad

Acreditación titulaciones

No

Evaluación Sumativa

Cuestionarios estudiantes. En ocasiones otros

Cuestionarios estudiantes
Pares
Ev externos
Director

Cuestionarios estudiantes

Mayoritariamente Cuestionarios
Otras: pares, jefe, autoevaluación

Cuestionarios
Poca efectividad
DOCENTIA

Cuestionarios estudiantes Poca efectividad

Evaluación Formativa

No

Sí (parcialmente)

Sí (50%)

No

No

 

 

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