|
||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
.2012 - Volumen 5, Número 1 (e)
|
||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
La Evaluación de la Docencia en Iberoamérica |
||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
La evaluación de la docencia se ha convertido durante estos años en un referente inexcusable para la consecución de la calidad en la enseñanza. Durante los últimos años ha ido cambiando, desde una situación en la que no había ningún referente de este tipo de evaluación hasta la actualidad, en la que prácticamente todos los países iberoamericanos poseen centros o servicios relacionados con los ministerios de educación centrados en la evaluación de la calidad de la educación de sus sistemas, lo que está generando mucha información, que como señalan Murillo y Román (2010:98) …”si antes afirmábamos que no hay mejora sin evaluación, ahora estamos convencidos de que la evaluación puede ser el mayor obstáculo para el avance.” El logro cognitivo continúa siendo lo prioritario e importante a medir en el campo educativo formal y estas evaluaciones se caracterizan por una gran fragmentación (Murillo y Román, 2010). Es indudable que la evaluación de cualquier sistema educativo ha de ser global, no fragmentada, teniendo en cuenta de forma holística los elementos que componen la realidad educativa: no podemos evaluar únicamente un sistema por los aspectos cognitivos, ni por otro aspecto considerado de manera aislada. La Educación es el resultado de la conjunción de múltiples y diversos aspectos, en el que incluyen los aspectos contextuales, el profesor, el alumno, sus relaciones, etc. En este sentido coincidimos por Murillo y Román (2010) en cuanto que propugnan esta evaluación de la escuela en su conjunto y en la que debe incluirse la evaluación de la gestión de las administraciones educativas y fomentar el compromiso de la sociedad en la que se insertan. La educación debe ser un instrumento para la participación social, no un elemento aislado de la sociedad que la genera y la sustenta. Dentro de la Evaluación de la docencia encontramos muchos y variados aspectos relacionados. La Evaluación de la Docencia en Iberoamérica debe partir de una situación multivariada, en la que se sitúan no solo los aspectos relacionados con la evaluación de la docencia sino también con los aspectos demográficos, etc. de cada uno de los países en que se va a analizar. Diversos estudios nos dan cuenta de la situación y desarrollo en distintos países (Morles, Medina y Álvarez, 2003; Salazar, 2008; Rodríguez, 2008; Parra y Trujillo, 2008; Claverie, González y Pérez, 2008; Jornet, 2009; González Such, 2009). La búsqueda de la calidad es una constante en cualquier sistema educativo. Para lograrla, es necesario establecer una serie de requisitos y procesos que la garanticen. El eje vertebrador de cualquier sistema educativo es el binomio profesor-estudiante. Resulta evidente la necesidad de esta evaluación. Inicialmente en la mayoría de países se ha establecido el sistema de evaluación de la docencia en niveles universitarios. No obstante, en los niveles no universitarios esta evaluación no pasa de ser anecdótica y de carácter voluntario. La internacionalización es uno de los conceptos que actualmente está tomando mayor auge. Esta internacionalización implica una serie de lineamientos sobre la base de la diversidad evidente de los sistemas que pretendemos homogeneizar. Esta dicotomía se ha revelado especialmente compleja en el EEES, en la que esta homogeneidad aún no se ha conseguido totalmente, a pesar de los diversos intentos por parte de los gobiernos. Resulta evidente la multiplicidad de variables que influyen en la Evaluación de la Docencia. Además, se debe tener en cuenta el ámbito político, social, educativo, etc. que confluye en cada país. Como ejemplo, se describen en las tablas XXX y XXXX la situación actual en la que se encuentra cada uno de los países, y que abarcan múltiples aspectos diferenciadores, desde número de habitantes hasta PIB de cada uno de los países. No obstante, creemos que se puede llegar a un modelo común que intente asumir una concepción globalizadora de la Evaluación de la Docencia como forma de poder contrastar los distintos sistemas y llegar a una mejora real de la docencia como eje fundamental de la educación. Aun considerando la complejidad aludida de la función docente, numerosos autores han intentado definir cuáles son sus características fundamentales y las implicaciones que ello tiene para la evaluación (González Such, 1998). Hernández y Sarramona (2002: 559) indican que parece existir un acuerdo en considerar que es “una ocupación polivalente, que incluye valores, principios morales, además de habilidades didácticas y conceptuales”. Tejedor (2003:176) señala que la “evaluación del profesorado es un proceso que debe orientarse fundamentalmente a la estimación del nivel de calidad de la enseñanza a fin de contribuir progresivamente a su mejora. (...) El proceso de evaluación debe concebirse igualmente como estrategia adecuada para fundamentar la investigación sobre el proceso de enseñanza-aprendizaje en el ámbito universitario, en cuyos resultados deberían basarse las pautas sugeridas para la necesaria innovación metodológica.” Tejedor (2003:164) señala dos consecuencias cuando aceptamos que el propósito de la evaluación es avanzar en la mejora (innovación):
La evaluación de la docencia puede ser estudiada desde distintos puntos de vista: desde inserta en un sistema de evaluación institucional hasta la evaluación de la docencia que realiza el profesor en un aula concreta. Esto hace que las dimensiones a considerar varíen en función de distintos aspectos. Incluso dentro de un mismo país las dimensiones que se consideran importantes para definir un profesor de calidad varían en función de los niveles considerados e incluso entre instituciones del mismo nivel (Universidades, etc.). Tabla 1. Organismos de acreditacion por año de creacion
Fuente: Revelo, 2002: 5 Los sistemas de acreditación y evaluación se pusieron en marcha en la década de los 90; otros se han ido creando posteriormente. Se han realizado algunos estudios sobre los sistemas de evaluación y acreditación en el ámbito iberoamericano (Revelo, 2002). En este estudio, Revelo realiza un análisis de 10 países. Como señala, “En conjunto se aprecia heterogeneidad, por su origen, objeto, naturaleza y formas de organización.” (Revelo, 2002:2). Estos sistemas se han creado en algunas ocasiones desde el gobierno: Argentina, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, España o Uruguay, mientras que en otros casos han sido las instituciones implicadas, agrupándose en asociaciones, las que crearon estos sistemas, como en el caso de México y Venezuela, o en el caso de Costa Rica en el que varias universidades se unieron. Ahora bien, ¿Qué indicadores podemos utilizar para evaluar la docencia y al profesorado?. Ha habido múltiples acercamientos, con distintos indicadores que señalan de nuevo que no existe un único modelo que pueda cubrir las necesidades de las instituciones o de los estados para evaluar al profesorado. Como ejemplo, incluimos las dimensiones e indicadores que Fernández Lamarra y Cópola (2008) extraen como fundamentales para evaluar la función docente a partir de otros informes en los que se comparan las seis primeras evaluaciones externas realizadas por la CONEAU. En este sentido, Tejedor (2009) realiza un metaanálisis referencial de conductas del profesor que se asocian con el buen rendimiento académico de los estudiantes universitarios y con una mayor eficacia docente. Tabla 2. Dimensiones e indicadores para evaluar la función docente
Fuente: Fernández Lamarra y Cópola, 2008. 2. Desarrollo: Fuentes e instrumentos para la evaluación de la docencia Son muchas las fuentes de información que se han propuesto para recoger información sobre el profesorado, las principales son:
Cabe utilizar varias fuentes de información para evaluar la docencia para favorecer la calidad de la información. Elizalde y Reyes (2008) señalan diversos modelos: el modelo basado en la opinión de alumnos, el modelo de evaluación a través de pares, el modelo de autoevaluación y el modelo de evaluación a través del portafolio. Los distintos usos de estas fuentes de información han sido objeto de análisis desde la RIIED (Litwin, 2010; Arbesú y Argumedo, 2010, Páez, 2010). Tejedor y Jornet (2008) indican que el modelo global de evaluación del subsistema profesorado deber tener en cuenta las siguientes aspectos y fuentes de información:
De cada una de estas fuentes podremos obtener información mediante distintos instrumentos, entre los que se encuentran los cuestionarios, la observación, los registros académicos, las pruebas de rendimiento, pruebas estandarizadas o no estandarizadas, los comentarios escritos, los grupos de discusión, los materiales utilizados por el profesor, etc. Un aspecto fundamental en la recogida de información de estos instrumentos es que estén técnicamente bien construidos. Aunque no se encuentra un acuerdo respecto a lo que se considera un buen profesor, Tejedor (2003:165) señala algunos aspectos que se tienen claros respecto la evaluación:
El estudio de la evaluación de la docencia exige tener en cuenta diversos aspectos:
Los aspectos que debemos considerar son:
Así, si consideramos un modelo global que asuma distintos aspectos del profesor para su evaluación, se pueden señalar los aspectos y fuentes de recogida de información que señala Tejedor (2003:165):
Resulta evidente la multiplicidad de variables que influyen en la Evaluación de la Docencia. Además, se debe tener en cuenta el ámbito político, social, educativo, etc. que confluye en cada país. La situación actual en la que se encuentra cada uno de los países es muy diversa y abarca múltiples aspectos diferenciadores, desde número de habitantes hasta PIB de cada uno de los países, así como la forma de evaluar la docencia. No obstante, desde la RIIED, y a partir de las distintas reuniones que se han realizado, se han concretado las siguientes Dimensiones a tener en cuenta (RIEED, 2008; Rueda, 2008):
Las líneas de investigación que se deben tener en cuenta a la hora de abordar la ED las indica Rueda en 2008:
Durante el último coloquio de la RIIED se realizaron distintos acercamientos para analizar la situación actual de la Evaluación de la Docencia en algunos países: Rueda et al, 2010; Lora, Torquemada y Olvera, 2010; Contreras, 2010; Cordero y Luna, 2010), o desde la perspectiva de la evaluación de competencias docentes (Cisneros-Cohernour y Stake, 2010; Leyva, 2010; García y Loredo, 2010, entre otros trabajos. Como vemos, la RIIED está centrando su trabajo en muchos ámbitos de la Evaluación de la Docencia para dar respuesta a una realidad: la mejora de la docencia en los distintos niveles educativos como pilar fundamental para mejorar la calidad de la enseñanza, en un ámbito en el que la característica fundamental es la heterogeneidad, tanto a nivel de estados (extensión, número de habitantes, etc.) como en los sistemas educativos y, por supuesto, en la evaluación de la docencia que es el ámbito que nos ocupa. La pregunta es si llegaremos algún día a consensuar un modelo de evaluación que tenga unas características comunes. Como podemos comprobar, la Evaluación de la Docencia es un tema de especial relevancia en el que debemos tener en cuenta múltiples factores. Una evaluación bien realizada repercutirá sin duda en la mejora de la enseñanza en cualquiera de los niveles considerados.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS Cisneros-Cohernour, E. y Stake, R. (2010). La Evaluación de la Docencia en Educación Superior: de Evaluaciones Basadas en Opiniones de Estudiantes a Modelos por Competencias. Reflexiones sobre el Caso Mexicano. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, 3 (1e), pp. 218-231. http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art17.pdf. Claverie, J., González, G., y Pérez, L. (2008). El Sistema de Evaluación de la Calidad de la Educación Superior en la Argentina: El modelo de la CONEAU. Alcances y Límites para Pensar la Mejora. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, 1(2), pp. 148-164. Contreras, G. (2010). Diseño y Operación de un Sistema de Evaluación del Desempeño Docente con Fines Formativos: la Experiencia de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, Chile. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, 3 (1e), pp. 179-191. http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art14.pdf Cordero, G. y Luna, E. (2010). Retos de la Evaluación de los Programas de Formación de Profesores: el Caso de un Programa en Métodos de Aprendizaje Cooperativo. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, 3 (1e), pp. 192-201. Dirección Nacional de Información y Evaluación de la Calidad Educativa (2007): Anuario Estadístico Educativo 2006. Disponible en: http://www.oei.es/pdfs/anuario_estadistico2007.pdf Elizalde, L. y Reyes, R. (2008). Elementos clave para la evaluación del desempeño de los docentes. Revista Electrónica de Investigación Educativa, Especial. Disponible en: http://redie.uabc.mx/NumEsp1/contenido-elizaldereyes.html Fernández Lamarra, N.; Coppola, N. (2008).La Evaluación de la Docencia Universitaria en Argentina. Situación, Problemas y Perspectivas. EnMemorias del IV Coloquio Iberoamericano sobre la Evaluación de la Docencia. México, DF. 29, 30 y 31 de octubre de 2008 p. 96-123. Disponible online en: http://rinace.net/riee/numeros/vol1-num3_e/art7.pdf García, B. y Loredo, J. (2010). Validación de un Modelo de Competencias Docentes en una Universidad Pública y otra Privada en México. Reflexiones sobre el Caso Mexicano. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, 3 (1e), pp. 246-263. http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art19.pdf. González Such, J. (1998): Evaluación de la Docencia Universitaria. Valencia: CSV. González Such, J. (2009): La evaluación del profesorado Universitario. En J.M. Jornet (Ed.): La letra sin sangre entra. Testimonios sobre la educación en la España democrática (1978-2008). Valencia: PUV. Hernández, M. y Sarramona, J.: La autoevaluación docente. Una propuesta para la formación profesional. Bordón 2002, 54, 4, 559-575. http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art15.pdf. Jornet, J. M. (2009): La evaluación del sistema educativo en la España democrática. En J.M. Jornet (Ed.): La letra sin sangre entra. Testimonios sobre la educación en la España democrática (1978-2008). Valencia: PUV. Leyva, Y.E. (2010). La Evaluación como Recurso Estratégico para la Mejora de la Práctica Docente ante los Retos de una Educación Basada en Competencias. Reflexiones sobre el Caso Mexicano. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, 3 (1e), pp. 232-245. http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art18.pdf Leyva, Y.E. (2010). La Evaluación como Recurso Estratégico para la Mejora de la Práctica Docente ante los Retos de una Educación Basada en Competencias. Reflexiones sobre el Caso Mexicano. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, 3 (1e), pp. 232-245. http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art18.pdf. Litwin, E. (2010): La Evaluación de la docencia: plataformas, nuevas agendas y caminos alternativos. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, v3, n1e, Disponible online en: http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art4.html Lora, L.E; Torquemada, A.D. y Olvera, B.I. (2010): Usos e impacto de la docencia en la Universidad Autónoma del estado de Hidalgo: resultados de la meta-evaluación. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, v3, n1e, Disponible online en: http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art7.html Morles, V.; Medina, E. y Alvarez, N. (2003): La educación Superior en Venezuela. Informe 2002 a IESALC_UNESCO. Murillo, F.J. y Román, M. (2010): Retos en la evaluación de la calidad de la educación en América Latina. Revista Iberoamericana de Educación, n 53n, 97-120. Páez, R.O. (2010). Evaluación de las funciones docentes en Entornos Instructivos Virtuales (EIV). Certezas, cuestionamientos y sinceramiento. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, 3 (1e), pp. 147-158. http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art11.pdf. Parra Sandoval, M.C. Trujillo, M. (2008). La Evaluación de la Docencia Universitaria en Venezuela: una Tarea Inconclusa. EnMemorias del IV Coloquio Iberoamericano sobre la Evaluación de la Docencia. México, DF. 29, 30 y 31 de octubre de 2008 p. 85-95. Disponible online en: http://rinace.net/riee/numeros/vol1-num3_e/art6.pdf Revelo, J. (2002): Sistemas y organismos de evaluación y acreditación de la educación superior en Iberoamérica. Reto de garantía y de fomento de la calidad. Primer Seminario Internacional: Educación Superior, Calidad y Acreditación. Cartagena, 10 al 12 de julio. RIIED (2008). “Reflexiones sobre el diseño y puesta en marcha de programas de evaluación docente”. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, volumen 1, número 3 (e). Disponible en: http://www.rinace.net/riee/numeros/vol1-num3_e/reflexiones.pdf Rodríguez, J. G. Evaluación del Profesorado en Universidades Públicas. Una Aproximación a la Situación en Colombia.EnMemorias del IV Coloquio Iberoamericano sobre la Evaluación de la Docencia. México, DF. 29, 30 y 31 de octubre de 2008 p. 46-66. Disponible online en: http://rinace.net/riee/numeros/vol1-num3_e/art4.pdf Rueda Beltrán, M. (2008).La Evaluación del Desempeño Docente en las Universidades Públicas en México. InMemorias del IV Coloquio Iberoamericano sobre la Evaluación de la Docencia. México, DF. 29, 30 y 31 de octubre de 2008 p. 8-17. Disponible online en: http://rinace.net/riee/numeros/vol1-num3_e/art1.pdf Rueda, M.; Luna, E.; García, B. y Loredo, J. (2010): la evaluación de la docencia en las universidades públicas mexicanas: Un diagnóstico para su comprensión y mejora. Revista Iberoamericana de Evaluación Educativa, v3, n1e, Disponible online en: http://www.rinace.net/riee/numeros/vol3-num1_e/art6.html Salazar Ascencio, J. (2008). Diagnóstico Preliminar sobre Evaluación de la Docencia Universitaria. Una Aproximación a la Realidad en las Universidades Públicas y/o Estatales de Chile. InMemorias del IV Coloquio Iberoamericano sobre la Evaluación de la Docencia. México, DF. 29, 30 y 31 de octubre de 2008 p. 67-84. Disponible online en: http://rinace.net/riee/numeros/vol1-num3_e/art5.pdf Secretaría de Políticas Universitarias (SPU)(2006): Anuario 2006 de Estadísticas Universitarias de la República de Argentina. Tejedor, F. J. y Jornet, J. M. (2008). La evaluación del profesorado universitario en España. Revista Electrónica de Investigación Educativa, Especial. Disponible en: http://redie.uabc.mx/NumEsp1/contenidotejedorjornet.html Tejedor, F.J. (2003): Un modelo de evaluación del profesorado universitario. Revista de Investigación Educativa, 21 (1), 153-182. Tejedor, F.J. (2009): Evaluación del profesorado universitario: enfoque metodológico y algunas aportaciones de la investigación. Estudios sobre Educación, 16, 79-102. Anexo 1. Fuentes de información en la evaluación de la docencia en distintos
|
||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||